Cuando empecé a introducirme en el mundo del Design Thinking, la generación de ideas era mi parte favorita. Es fascinante la cantidad de herramientas chulas que existen para hacerte llegar a ideas diferentes. No obstante, con los años me he dado cuenta que una gran cantidad de ideas para un problema que no es el que realmente importa, sirven de poco.
¿Por qué queremos que estas ideas tengan éxito?¿Va a cambiar algo?¿Qué otro problema generamos al implementar la idea?
¿te ha pasado alguna vez lo de generar ideas con un equipo y al trabajarlas darte cuenta que no hay nadie que realmente se crea la idea?
Todo esto muchas veces sucede porque no estás partiendo del problema que realmente importa y afecta a la gente de la sala. Y todo esto es lo que, en mi opinión, la parte de análisis del problema a veces es la más importante.
Hoy te traigo una herramienta muy rápida pero reveladora para iniciar un análisis e identificación de problemas.
El uso de imágenes y tarjetas es un poderoso aliado a la hora de agilizar procesos tan tediosos como hacer un diagnóstico.

En cuanto ven la imagen y leen el texto saben directamente si es algo que han visto en su entorno.
En ese momento, deciden clasificar la tarjeta en uno de estos tres grupos:
- Nunca ocurre
- Ocurre a veces
- Siempre ocurre

Estas tarjetas de diagnóstico pueden comprarse en https://www.strategicplay.com/
Además también pueden utilizarse para hacer un diagrama de Ishikawa y analizar las fuentes de un problema.
Esta es una dinámica que no apoya el aprendizaje, sino que pretende poner sobre la mesa aquello que ya conoce el grupo, para poder trabajar sobre esto.
El aprendizaje en este caso es del facilitador/a, teniendo un mejor contexto del cliente y pudiendo adaptar otras dinámicas.